Los Challenge de internet y la seguridad de tu familia

Internet se ha vuelto una herramienta muy funcional donde millones de usuarios navegan todos los días para conectarse con lo que les interesa y quienes les importan. El contenido que se puede encontrar ahí es muy diverso y en ocasiones podemos enfrentarnos a información riesgosa, tal es el caso de los retos de internet o Challenge, que si bien no están encausados en provocar un daño, pueden llegar a ser peligrosos. 

Este es el caso del llamado “Momo Challenge”, un reto que incita a las personas a utilizar algunas aplicaciones con acceso a datos personales para contactar a Momo, cuando se realiza esa acción información personal es extraída y utilizada para hacer creer a las personas que Momo sabe de ellos. Posteriormente se solicita que cada jugador comparta el reto para hacer que nuevas personas se unan. 

Entre los mensajes que los usuarios reciben de Momo, hay algunos que incitan a generar algún tipo de daño hacia sí mismos o a otras personas y compartirlo en redes sociales. Al reto se le suma el hecho de que la figura de Momo genera terror entre los niños, ya que es una escultura mitad niña y mitad ave creada por un artista japonés, este diseño a sido centro de muchas discusiones. 

Real o no, el pánico que ha creado en la comunidad virtual mundial debe de ser considerado por los padres de familia como una alerta ante el contenido al que pueden tener acceso sus hijos. Esto requiere tomar medidas para reforzar la seguridad de las familias. 

Algunos de los consejos que los expertos brindan para cuidar el contenido que ven los niños son: 

Esta historia, considerada como un mito de internet, es una oportunidad para mejorar sus esfuerzos en la vigilancia del contenido digital que observan sus hijos. Tome la decisión de ver rutinariamente las páginas que visitan los más pequeños, incluyendo YouTube y videojuegos. Un software especializado en mediar este contenido es mucha ayuda para prevenir un riesgo latente.

Sigue de un modo cercano los comportamientos digitales y evalúa cuál de estos puede representar realmente un riesgo a la integridad de tus hijos. A la par, habla con ellos abiertamente y de un modo sincero sobre los peligros que hay en internet.

Las aplicaciones abarcan toda la escala del riesgo y van de educativas y estimulantes a inapropiadas y peligrosas. Revisa con regularidad el teléfono de tu hijo y si encuentras aplicaciones que parezcan riesgosas, búscala en Google y lee los comentarios de la misma. Observa las restricciones de edad y las reseñas de usuarios.

Desarrolla en tus hijos una valoración de lo que ellos miran. Aliéntalo a que exista un constante análisis del comportamiento que experimenta mientras navega en internet. Con esto le será posible resguardar su seguridad sin que tengas que estar presente.